tag:blogger.com,1999:blog-27925731655917916152024-03-13T11:28:08.024+01:00PlataEnmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.comBlogger10125tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-40341619267139853222012-11-15T22:24:00.001+01:002012-11-15T22:25:01.376+01:00Diez Tal y como dijo Neret que
haría, en los siguientes tres días buscó y encontró algo con lo que Gala se podría
entretener. Así que fue a su habitación para hablar con ella.<br />
<div class="MsoNormal">
-¿Se puede? –preguntó
dando tres toques en la puerta con educación.</div>
<div class="MsoNormal">
-Si, adelante –contestó.</div>
<div class="MsoNormal">
-Tengo algo para ti, pero
no puedo traértelo a la habitación. ¿Me acompañas fuera? –dijo tras abrir la
puerta verde.</div>
<div class="MsoNormal">
Emocionada y desconfiada al mismo tiempo Gala
asintió y salió al pasillo. Siguió a Neret hasta la entrada principal de la
fortaleza y nada más salir torcieron a la derecha rodeándola. Caminaban por
encima de grandes rocas que formaban un camino algo inestable y a su izquierda
había más árboles de los que Gala jamás había visto. Árboles frondosos, de
grandes hojas y troncos fuertes. De repente se pudo ver una gran explanada de
hierba por la que Neret comenzó a caminar.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala temía por lo que pudiera ocurrir, se
habían alejado de la fortaleza y estaban solos. No sabía si pensar que Neret
confiaba en ella o que algo malo pasaría.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Sabes montar a caballo?
–preguntó Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
-Mi padre me enseñó antes
de morir… –respondió entristecida -. Pero hace mucho tiempo de aquello…</div>
<div class="MsoNormal">
Neret guardó silencio por un momento y
entonces se detuvo. </div>
<div class="MsoNormal">
-Ahí tienes tu
entretenimiento.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala levantó la mirada y vio un caballo negro
precioso. Tenía unas patas fuertes, al igual que el cuello. Corría de un lado
para otro mirando a Neret fijamente y las crines se le alborotaban con los
movimientos bruscos. </div>
<div class="MsoNormal">
-¿No vas a acercarte? </div>
<div class="MsoNormal">
-¿Yo? –preguntó Gala
creyendo que Neret bromeaba.</div>
<div class="MsoNormal">
-Es tu caballo, tendrás
que domarlo tú. Tómate tu tiempo.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret se alejó unos cuantos metros y se apoyó
en un árbol frondoso. Esperaba con los brazos cruzados, haciendo notar sus
músculos. Su melena negra colgaba por delante de su pecho, y tenía esa sonrisa
ladeada que a Gala le hacía estremecer.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala se armó de valor y se acercó poco a poco
al caballo, pero este huía de ella. A veces adoptaba una postura desafiante y
Gala sentía miedo, así que retrocedía varios pasos.</div>
<div class="MsoNormal">
-Te he oído hace rato.
Sal de ahí –dijo Neret sin moverse, en un tono que Gala no podía escuchar.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Te has vuelto loco?
–preguntó Draian saliendo de detrás de un árbol.</div>
<div class="MsoNormal">
-Vamos, solo es un
caballo.</div>
<div class="MsoNormal">
-Un caballo salvaje. Gala
se romperá todos los huesos del cuerpo si se acerca a él.</div>
<div class="MsoNormal">
-No seas idiota. Ya está
domado. Espero que no pensaras en serio que iba a dejarla sola con un animal
salvaje…</div>
<div class="MsoNormal">
-Pues la verdad…</div>
<div class="MsoNormal">
Neret le interrumpió con una risa.</div>
<div class="MsoNormal">
-No sé que siento
exactamente –dijo poniéndose serio y sin apartar la vista de Gala -. Solo sé
que cuando me mira se para el mundo y dejo de respirar.</div>
<div class="MsoNormal">
-Es lo más cursi y
emotivo que he escuchado nunca.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret giró la cabeza para mirar a Draian y le
sonrió mientras levantaba las cejas.</div>
<div class="MsoNormal">
Entonces un ruido llamó la atención de ambos.
Gala se había caído al suelo. Neret cambió totalmente la postura relajada que
tenía apoyado en el árbol y se acercó rápidamente para ver si estaba bien. Mientras,
Draian se volvió a esconder detrás del árbol.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Te has hecho daño?
–preguntó Neret a Gala mientras le extendía la mano.</div>
<div class="MsoNormal">
-No. Quita.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala golpeó la mano de Neret y se levantó
sola.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Te regalo un caballo y
te cabreas conmigo?</div>
<div class="MsoNormal">
-Lo haces a propósito. </div>
<div class="MsoNormal">
-¿El que exactamente?</div>
<div class="MsoNormal">
-Me regalas algo que
sabes que me asustará y hará que me caiga mil veces –contestó mientras le daba
un empujón con todas sus fuerzas en el pecho-. Y mientras yo me lleno de barro
te quedas mirando, riéndote de mi.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala volvió a golpear el pecho de Neret, pero
este seguía sin inmutarse.</div>
<div class="MsoNormal">
-Querías entretenerte con
algo, preciosa –dijo con retintineo en la voz-. Y las cosas que entretienen no
son fáciles de hacer. </div>
<div class="MsoNormal">
-No vuelvas a llamarme
así –dijo Gala mientras se alejaba de Neret, dirigiéndose hacia el caballo.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿O que? –preguntó Neret
con una sonrisa picarona en la cara mientras la seguía.</div>
<div class="MsoNormal">
-O te arrepentirás…</div>
<div class="MsoNormal">
Las palabras de Gala sonaban atrevidas, hasta
que se sentía intimidada o ruborizada, entonces sonaban cobardes a la par que dulces.
Neret soltó una sonrisa y volvió lentamente al árbol donde estaba escondido
Draian.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Crees que me ganaré su
confianza? –pregunto Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
-Tal vez si, si la ves de
vez en cuanto y dejas de ser tan bestia y de tenerla encerrada en la habitación
–contestó Draian aun medio oculto detrás del árbol. </div>
<div class="MsoNormal">
-Capto la indirecta…</div>
<div class="MsoNormal">
-En semanas no le has
dirigido la palabra y se ha pasado los días encerrada. Pero me dices cosas que
hacen que piense que ella te interesa. No te entiendo…</div>
<div class="MsoNormal">
-Me interesa, pero no
quiero reconocerlo. Ella no parece estar interesada en mí. Aun así… la
protegeré de todo.</div>
<div class="MsoNormal">
-No puede estar
interesada de la noche a la mañana en alguien que prácticamente la ha
secuestrado, la ha golpeado, la ha…</div>
<div class="MsoNormal">
Neret habló y cortó sus palabras.</div>
<div class="MsoNormal">
-Es dulce.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué? </div>
<div class="MsoNormal">
-Gala, es dulce. </div>
<div class="MsoNormal">
-Pero también tiene
carácter. Ninguno de tus soldados se atrevería a golpearte el pecho, eso
seguro.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret rompió a reír con los ojos fijos en
Gala, que alejada de él intentaba acariciar al caballo.</div>
<div class="MsoNormal">
-Aun así Draian… ¿Crees
que es la indicada?</div>
<div class="MsoNormal">
-Lo es. Y no debes
dudarlo. Porque hay algo que está claro.</div>
<div class="MsoNormal">
Hubo unos dos minutos de silencio hasta que
Neret cansado de esperar decidió hablar.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Y que es? ¿Qué está
claro?</div>
<div class="MsoNormal">
-Mírala.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret así lo hizo, y sonrió levemente.</div>
<div class="MsoNormal">
-Ahí tienes tu respuesta
–dijo Draian-. Jamás has sonreído al mirar a una mujer. Y no lo harás si no es
por ella.</div>
<div class="MsoNormal">
Se alejó entre la espesura del bosque y Neret
siguió apoyado en el tronco, aunque ahora mucho más pensativo. Pero algo hizo
que su mente se pusiera en blanco por unos instantes. Gala se asustó por un
sonido que su “mascota” hizo y se cayó al suelo, llenándose de barro.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿No tenías más sitio
para caerte que el único trozo de barro que hay? –preguntó Neret entre risas a
medida que se acercaba caminando a ella.</div>
<div class="MsoNormal">
-Eres idiota.</div>
<div class="MsoNormal">
-Yo al menos jamás me he
llenado de barro por una caída.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret levantó del suelo a Gala y la cogió en
brazos sin ningún tipo de esfuerzo. Parecía que para él, Gala no pesaba más que
la hoja más ligera del bosque.</div>
<div class="MsoNormal">
-Tal vez por una caída
no…</div>
<div class="MsoNormal">
Antes de que Neret pudiera entender las
palabras de Gala, esta le había manchado la cara de barro con sus manos y se
había escabullido de sus brazos. Neret comenzó a correr detrás de ella y sin
duda, nada le costó alcanzarla.</div>
<div class="MsoNormal">
-Ven aquí –dijo serio
mientras la agarraba de un brazo y la daba media vuelta para que le mirara.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala sintió pánico por un momento, él ya la
había golpeado antes. Pero entonces Neret la acercó a su torso cálido,
agarrándola por la cintura y le apartó un mechón de pelo de la cara, colocándoselo
detrás de la oreja. Entonces ella se relajó y le miró fijamente a los ojos.</div>
<div class="MsoNormal">
-A otra persona le habría
cortado las manos –afirmó Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
-Eso solo quiere decir
que eres un bestia.</div>
<div class="MsoNormal">
-O que jamás te haría
daño.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala se ruborizó e intentó librarse de los
brazos de Neret que la sostenían por la cintura. Pero este la agarró aun con
más fuerza y se inclinó para rozar sus labios.</div>
<div class="MsoNormal">
-Para –suplicó Gala con
la voz entrecortada. </div>
<div class="MsoNormal">
Neret se detuvo en seco y adoptó de nuevo su
postura firme.</div>
<div class="MsoNormal">
-Vámonos –dijo. </div>
<div class="MsoNormal">
Comenzó a caminar en dirección a Drukan, ya
se hacía de noche y a Gala le atemorizaba un poco el bosque, así que le siguió
de cerca.</div>
<div class="MsoNormal">
Cuando llegaron, Neret desapareció pronto de
su lado. Así que la joven fue directa a su habitación y tras darse un baño, se
metió en la cama, esperando que al día siguiente todo siguiera bien con su
protector, Neret.</div>
Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-13672467648745861712012-07-29T17:30:00.003+02:002012-07-29T17:32:06.638+02:00Nueve<div class="MsoNormal">
Neret nunca tuvo mucha
delicadeza, no sabía como actuar con dulzura de continuo. Cuando quería hacer
algo lo hacia como una orden a sí mismo. Así que con Gala a hombros llegó a la
habitación que estaba al lado de la suya. La dejó en el suelo y le abrió la puerta
verde caballerosamente. </div>
<div class="MsoNormal">
-Espero que sea de tu agrado
–dijo Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala entró en la habitación y se sorprendió al ver que era totalmente
igual que la otra, excepto por el tamaño, esta era mucho más espaciosa.</div>
<div class="MsoNormal">
-En la otra habitación tenía ropa –dijo Gala.</div>
<div class="MsoNormal">
-En esta también y te aseguro que
te gustará mucho más.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Eso quiere decir que te gusta
más a ti? –pregunto enfurruñada.</div>
<div class="MsoNormal">
-Exacto –contestó mostrando sus
dientes blancos.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret cerró la puerta de la habitación dejando a Gala dentro y se fue
caminando despacio siendo consciente de que necesitaba su chaleco para
cubrirse.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
-Al fin te encuentro. ¿Dónde te
habías metido? –preguntó Draian a Neret en la entrada principal.</div>
<div class="MsoNormal">
-Yo estaba con…</div>
<div class="MsoNormal">
Draian no le dejó acabar de hablar.</div>
<div class="MsoNormal">
-Ya, vale. No haré comentarios al
respecto –dijo sonriendo -. Toma tu chaleco, supuse que lo buscarías.</div>
<div class="MsoNormal">
-Oh si, gracias.</div>
<div class="MsoNormal">
-Deberías hacerle un regalo
–sugirió Draian tras un corto silencio -. Lo he estado pensando y tal vez darle
algo significativo haga que se sienta más cómoda y que vea que aquí está bien.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Un regalo?</div>
<div class="MsoNormal">
-Si Neret, un regalo. Para ti es
difícil de asimilar, pero cuando una persona quiere a otra normalmente le
regala algo significativo.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Desde cuando? </div>
<div class="MsoNormal">
-¿Sabes que? Olvídalo
–dijo Draian desesperado -. No tienes que entenderlo, simplemente hazlo. ¿De
acuerdo?</div>
<div class="MsoNormal">
-Está bien…</div>
<div class="MsoNormal">
Draian sonrió. </div>
<div class="MsoNormal">
-Te echo una carrera
–dijo el elfo mientras echaba a correr, sabiendo que Neret no tardaría dos
segundos en perseguirle.</div>
<div class="MsoNormal">
Draian y Neret se comportaban como niños
cuando estaban a solas. Disfrutaban haciendo tonterías que delante de los
soldados no podían, especialmente Neret. Debía mantener la apariencia de un
líder duro, fuerte y justo. Aunque realmente lo fuera no podía permitirse el
lujo de tomarse un descanso y dejar de estar firme delante de cualquiera que no
fuera Draian, su mejor amigo desde antes de que pudiera recordar. Se protegían
mutuamente y maduraban en un abrir y cerrar de ojos si alguien podía verles. Su
amistad estaba basada en la confianza y reforzada por el tiempo. Ambos sabían
que nadie les separaría. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Pasaron dos semanas y a pesar de que Neret no
se acercó prácticamente a Gala por falta de tiempo, no hubo ningún intento de
huida por parte de la joven, así que podría decirse que fueron dos semanas
tranquilas.</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Cállate! –gritó alguien
desde el interior del castillo.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret estaba fuera con los caballos, y miró
para el ventanal del que provenía la voz masculina. Era el de la habitación de
Gala. </div>
<div class="MsoNormal">
Corrió hasta llegar a la habitación de puerta
verde y por segunda vez arrancó el cerrojo debido a la preocupación que sentía.
Nada más entrar vio como uno de sus soldados agarraba las manos de Gala y la
mantenía pegada a su cuerpo. Sin vacilar, Neret se abalanzó sobre él,
recibiendo un puñetazo que hizo que su labio comenzara a sangrar, pero no dejó
de darle golpes hasta que solo quedó un cuerpo inconsciente en el suelo.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Te encuentras bien?
–preguntó a Gala, que se encontraba de pie al lado de la cama, más pálida de lo
normal.</div>
<div class="MsoNormal">
-Si… –susurró. </div>
<div class="MsoNormal">
-¿Te ha molestado alguien
más?</div>
<div class="MsoNormal">
-No…</div>
<div class="MsoNormal">
Sin decir ni una sola palabra más, Neret
salió de la habitación y al segundo entraron dos soldados para llevarse el
cuerpo del hombre caído. </div>
<div class="MsoNormal">
Gala se sentó en la cama sin pestañear,
añorando el calor de su hogar. Incluso aquel tiempo en el que podía correr
hacia Alejandro y sentirse amada. Pero eso era pasado, sabía que debía aguantar
allí, aunque a partir de ahora las cosas serían distintas. En las últimas dos
semanas había intentado no llamar la atención, algo casi imposible por las
ropas que Neret le había dejado en el armario, ya que eran chalecos y
pantalones cortos de cuero ajustado. No eran apropiadas para pasear con ellas,
ni para cualquier otra función. Tampoco había intentado huir, ni dio problemas
a Neret, pero a partir de ahora su comportamiento debería ser mucho más
rebelde, si no más soldados intentarían forzarla pensando que ella no se
resistiría. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Gala se dirigió al comedor después de unas
horas, al atardecer. Y bajó a la cocina por las escaleras de piedra que había
nada más entrar a la izquierda.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Puedo ayudarte en algo?
–le dijo una mujer con amabilidad.</div>
<div class="MsoNormal">
-No… Bueno… Yo me
preguntaba si podría ayudar en algo…</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Ayudar? –preguntó
sorprendida -. Esto es la cocina, no creo que a Neret le guste que estés aquí.
Deberías volver a tu habitación…</div>
<div class="MsoNormal">
Un chirrido de una de las puertas de la
cocina llamó la atención de ambas. Draian había escuchado la conversación e
intervino en ella evitando una situación incómoda. </div>
<div class="MsoNormal">
-Veo que has conocido a
la mejor cocinera de Drukan.</div>
<div class="MsoNormal">
-No he tenido la oportunidad
de presentarme formalmente –dijo Gala.</div>
<div class="MsoNormal">
-Lo siento –añadió la
mujer -. Me llamo Rebecca.</div>
<div class="MsoNormal">
La cocinera tenía una larga melena ondulada
de color castaño, a juego con unos ojos algo más oscuros. Sus facciones eran
finas y su cuerpo delgado. Vestía con una falda anaranjada que llegaba hasta el
suelo, cubierta en una pequeña parte con un delantal blanco a juego con su
camisa, que estaba metida por dentro de la falda.</div>
<div class="MsoNormal">
-Yo soy…</div>
<div class="MsoNormal">
Rebecca la interrumpió.</div>
<div class="MsoNormal">
-Gala. Lo sé. Todo el
mundo lo sabe.</div>
<div class="MsoNormal">
De nuevo Draian intervino dirigiéndose a
Gala.</div>
<div class="MsoNormal">
-Siéntate –dijo
amablemente señalando una silla que estaba al lado de una mesa, en el centro de
la cocina -. Estoy seguro de que Rebecca encontrará algo con lo que la podrás
ayudar.</div>
<div class="MsoNormal">
Draian cogió con delicadeza el brazo de la
cocinera y la hizo avanzar pasando un par de arcos de ladrillo que llevaban a
otras salas de cocina. A esa distancia no podía escuchar la conversación que
mantenían, pero si podía verles. Draian parecía intentar convencer a Rebecca de
algo, y ella movía la cabeza de forma negativa.</div>
<div class="MsoNormal">
De nuevo la puerta chirriante llamó la
atención a sus espaldas.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué haces aquí? –dijo
Neret muy serio.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala señaló a Draian y a Rebecca sin dejar de
mirar a Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
-Me preguntaba si podía
hacer algo de utilidad. No puedo estar todo el día encerrada en la habitación.</div>
<div class="MsoNormal">
-Yo te buscaré algo con
lo que entretenerte. Dame tres días.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret levantó la mirada hacia su amigo y
Rebecca, y Gala copió su gesto. Draian acariciaba con delicadeza el rostro de
la cocinera y la miraba como si estuvieran solos en el mundo. </div>
<div class="MsoNormal">
Draian estaba enamorado, no había duda. </div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-74481732597212589612012-07-22T15:13:00.001+02:002012-07-22T15:14:50.108+02:00Ocho<span style="background-color: white;"> Neret y Gala salieron de la caseta de piedra y se dirigieron al comedor
del castillo. La sala de suelo de mármol
blanco estaba llena de mesas largas y bancos. Del techo colgaban estandartes de
color negro y en las paredes había ventanales
muy altos que llamaban la atención nada más entrar, pero no en el caso
de Gala, que se moría por comer cualquier cosa de toda aquella comida que
estaba encima de las mesas en bandejas de plata.</span><br />
<div class="MsoNormal">
-Sírvete –dijo Neret dirigiéndose
a Gala.</div>
<div class="MsoNormal">
Ella entró en la sala casi corriendo, habría actuado de forma más
reservada y tímida de no ser porque en la sala no había nadie. Neret sonrió y
se alejó por el pasillo.</div>
<div class="MsoNormal">
-Hola Gala –dijo una voz desde la
puerta a los quince minutos.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala levanto la cabeza y miró aquella figura inconfundible. Su perilla y
su melena rubia por debajo de los hombros le caracterizaba entre tantos
soldados de pelo moreno. Entre algunos mechones mostraba dos orejas largas y
acabadas en punta, ambas adornadas con dos aros color oro. Su tez, casi tan
pálida como la de Gala mostraba unos rasgos faciales llenos de encanto y
serenidad. Tenía una gran altura, pero no la suficiente como para sobrepasar a
Neret. Era delgado y mucho menos musculado que los soldados que la joven había
visto hasta entonces, pero seguro que era más ágil y sigiloso. Con el estómago
lleno y la mente mucho más despejada que los últimos días, Gala al fin
reconoció un elfo situado en la puerta y se quedó hipnotizada con sus ojos,
parecían hechos de cristal verde. Y entonces aquella voz volvió a hablar.</div>
<div class="MsoNormal">
-Siento que te encuentras mejor.
Eso me alegra.</div>
<div class="MsoNormal">
-Si, Draian –dijo Gala -. Aunque la cabeza todavía me da
vueltas. Ayer me di un buen golpe… –añadió mientras dejaba de comer y se
limpiaba las manos.</div>
<div class="MsoNormal">
-Bueno, estoy seguro de que eso
se puede arreglar –dijo Draian acercándose al banco en el que estaba sentada
Gala.</div>
<div class="MsoNormal">
Draian se sentó a su lado y puso la mano sobre la herida de la joven,
con los labios entrecerrados dijo unas palabras que Gala no pudo comprender y
entonces él apartó la mano y se levanto.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Mejor? –preguntó.</div>
<div class="MsoNormal">
-Mucho –respondió sorprendida a
la vez que se tocaba la piel lisa y perfecta donde antes había una herida
abierta.</div>
<div class="MsoNormal">
-Estas llena de barro. Necesitas
un baño.</div>
<div class="MsoNormal">
-Si… puede que encuentre una
bañera en las mazmorras. –bromeó.</div>
<div class="MsoNormal">
El elfo echó a reír y salió por la puerta. Gala sin dudarlo le siguió.
Draian era el único que hasta ahora se había portado realmente bien con ella,
estaba segura de que no dejaría que la hicieran daño delante de él. </div>
<div class="MsoNormal">
-Espero que esta habitación sea
de tu agrado Gala –dijo deteniéndose delante de una puerta azul ornamentada con
hojas de color bronce -. Dentro tienes todo lo que puedes necesitar, incluso
ropa que creo que te servirá.</div>
<div class="MsoNormal">
-Puede que a Neret no le guste
esto… –dijo Gala con miedo en sus palabras.</div>
<div class="MsoNormal">
-No te preocupes. Es más bueno de
lo que parece ser. Yo hablaré con él.</div>
<div class="MsoNormal">
Draian sonrió y se alejó con paso firme. Mientras desaparecía escaleras
abajo Gala entró en la habitación y cerró la puerta con un pestillo enorme que
tenía a la altura del cuello. Se dio la vuelta y pudo ver una cama más alta de
lo normal al final de la habitación, tenía unas sábanas y una colcha que
parecían de seda y algodón, el color rojo de estas hacia juego con las cortinas
gruesas que colgaban del techo, y también con el armario que se encontraba a su
derecha decorado con las mismas hojas color bronce de la puerta. Había una
alfombra rectangular de color negro desde la puerta hasta la cama, parecía
suave. Pero lo que más llamó la atención de Gala fue una puerta al fondo a la
derecha que dejaba ver un suelo de mármol anaranjado con una bañera de cuatro
patas del mismo tono. Fue directa a llenarla de agua tibia, quitándose lo que
quedaba de su vestido por el camino. Se sumergió por completo en el agua y por
un momento olvidó hasta el lugar en el que estaba.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
En el recinto de adiestramiento estaba Neret, con el pecho al
descubierto y espada en mano, dando consejos a un grupo de sus soldados sobre
como luchar.</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Neret! –le llamó a voces Draian
desde lejos.</div>
<div class="MsoNormal">
El líder dejó su espada y los soldados continuaron practicando mientras
él saltaba la valla para acercarse de una carrera a Draian.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué pasa? –preguntó.</div>
<div class="MsoNormal">
-He llevado a Gala a una
habitación. En la segunda planta, al lado de las escaleras –dijo Draian sin
temor a como pudiera reaccionar Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
-No se quedará ahí.</div>
<div class="MsoNormal">
-Pero… No puedes encerrarla en
una celda…</div>
<div class="MsoNormal">
Neret agachó la cabeza y levantó la mirada hacia Draian con una pequeña
sonrisa. </div>
<div class="MsoNormal">
-Quiero que duerma en la
habitación que está al lado de la mía.</div>
<div class="MsoNormal">
Draian se quedó sorprendido.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿En serio? –preguntó sin creerse
lo que escuchaba.</div>
<div class="MsoNormal">
-Si. Draian, nunca te he tratado
como un soldado, siempre has sido un hermano para mí. Me has aconsejado, me has
guiado y siempre por el camino correcto. Si dices que estando ella aquí las
cosas irán a mejor, se quedará aquí. Y si dices que es especial, no puedo dejar
que esté lejos de mí, ¿no crees?</div>
<div class="MsoNormal">
-Haces lo correcto –respondió con
alivio y satisfacción -. Pero sabes que es muy rebelde, que algo dentro de ella
intentará irse de aquí. Tendrás que tener paciencia.</div>
<div class="MsoNormal">
-Intentaré tenerla, pero tal vez
ella también tenga que tenerla conmigo.</div>
<div class="MsoNormal">
-No la tendrá si la golpeas cada
vez que hace algo mal.</div>
<div class="MsoNormal">
-Me conoces Draian, nunca he
tocado a ninguna mujer. No sé que me pasó por la cabeza en ese instante para
golpearla.</div>
<div class="MsoNormal">
-Lo sé. Tranquilo.</div>
<div class="MsoNormal">
Neret dio un toque en el hombro a Draian y caminó hasta adentrarse en el
castillo. Tal y como suponía el elfo, Neret fue a la habitación de Gala, pero
al intentar entrar vio que había cerrado la puerta con pestillo. En un acto de
preocupación por lo que podría estar pasando dentro de la habitación y temiendo
por las intenciones de Gala, dio una patada a la puerta azul y arrancó el
cerrojo.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Gala? –la llamó dando unos
pasos hacia la alfombra.</div>
<div class="MsoNormal">
Entonces la vio, estaba en la bañera con el pelo mojado cayendo hacia el
lado derecho de su cuello. Gala había perdido la noción del tiempo, estaba
relajada hasta que Neret llegó y la sobresaltó con ese asalto a la habitación,
haciendo que el agua de la bañera salpicara el suelo.</div>
<div class="MsoNormal">
-Hola –dijo Neret de lo más natural
acercándose lentamente a ella.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala no entendía nada, acababa de arrancar el cerrojo de su habitación,
ella estaba desnuda en la bañera y él se acercaba sin motivos para decir un
simple “Hola”.</div>
<div class="MsoNormal">
-Esto no es protegerme, parece
una obsesión –le reprochó Gala.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Sería un problema para ti que
estuviera obsesionado contigo? –preguntó Neret agachándose al lado de la bañera
y tocando delicadamente el pelo de Gala.</div>
<div class="MsoNormal">
-Depende –respondió con timidez. </div>
<div class="MsoNormal">
-¿De que?</div>
<div class="MsoNormal">
Gala guardó silencio, no sabía que responder. El torso de Neret seguía
desnudo y eso la desconcentraba por completo. Tal y como suponía, Neret tenía
unos músculos perfectos, y en el pecho algo de vello que le hacía aun más
hombre.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Puedes darme algo para taparme?
–dijo evitando la pregunta de Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
Él sonrió. Cogió una especie de sábana suave y negra y se acercó a ella.
Gala se levantó, salió de la bañera y pisó el suelo de mármol frío. Neret, sin
dejar de mirarla a los ojos la enroscó en la suave tela.</div>
<div class="MsoNormal">
-Te llevaré a tu verdadera
habitación –dijo Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
Y la colgó de su hombro como si fuera un saco, mientras ella gritaba que
la soltara y daba patadas al aire.</div>
<div class="MsoNormal">
Salió de la habitación por la puerta azul y Draian estaba justo allí,
saliendo de la habitación de enfrente. Neret le miró y Draian arqueó una ceja.
Y sin decir nada, el líder torció a la izquierda y se fue escaleras arriba.
Draian le siguió con la mirada, pestañeó un par de veces y sin decir
nada se fue, escaleras abajo. </div>Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-39104846822103479292012-07-17T18:12:00.000+02:002012-07-17T18:13:06.434+02:00Siete<span style="background-color: white;"> Amaneció en Drukan y Draian pasó por delante de la
habitación de Neret como siempre, de camino al comedor. Pero esta vez se detuvo
en su puerta y vio sangre en el picaporte dorado. No dudó, entró sin llamar.</span><br />
<div class="MsoNormal">
<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué ha pasado? –preguntó mientras miraba a su alrededor
buscando algún asesino.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué? –dijo Neret sin saber que pasaba y con cara de sueño.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Hay sangre en el picaporte de tu puerta –le informó Draian
acercándose a la cama donde se encontraba.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret tardó unos
segundos en contestar.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Ayer tuve un problema, pero todo está bien –dijo al fin.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Draian no podía leer el pensamiento, pero si
podía adentrarse en el interior de las personas y sentir lo mismo que ellas
sienten, descubriendo así sus miedos, sus inquietudes o incluso sintiendo su
dolor.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Tu interior está inquieto –afirmó Draian.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Tenías razón… Respecto a Gala… Ayer la golpee –dijo
incorporándose en la cama.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Tan pronto? ¿Qué pasó? –preguntó angustiado y con la
mirada llena de pena. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-La llevaron por error a las mazmorras. Fui a sacarla de
allí y me golpeó con un palo… ¿Te lo puedes creer? Ni un guerrero armado se
enfrentaría a mi y ella me golpea con un palo…<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Por un momento
Draian soltó una pequeña risa.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Neret, los guerreros saben quien eres, ella no. Por eso se
atreve a contestarte y a pegarte y se atreverá a mil cosas más con tal de salir
de esta fortaleza. Lo único que quiere es ser libre.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Entonces que se vaya. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Pero no tiene a donde ir…<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¡Por eso la traje aquí! –gritó Neret cabreado consigo mismo
mientras se ponía en pie -. No dejaré esto así Draian. Ella no tiene a donde ir
y yo necesito mujeres para mis hombres. Si intenta escapar otra vez le enseñaré
quien manda.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Ella debe ser para ti, no para tus soldados.</div>
<div class="MsoNormal">
Draian no soltó ni
una sola palabra más. Se dio la vuelta hacia la puerta y se fue.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Pasada
aproximadamente una hora Neret fue a las mazmorras.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Despierta, ya has dormido suficiente –dijo mientras entraba
en la celda de Gala.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
La joven estaba
tirada en el suelo, encogida a más no poder y por su frente había varias zonas
con sangre seca.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Estoy despierta –dijo con miedo.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Ven aquí –ordenó Neret.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-No soy un perro, no obedezco tus órdenes.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Quieres quedarte encerrada aquí y morirte de hambre? Bien,
menos trabajo para mi –dijo mientras hacia el amago de cerrar la puerta de la
celda.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¡No! ¡Espera! –gritó Gala levantándose del suelo.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret se detuvo
firme con la puerta entreabierta. Llevaba ropa de cuero negro que le daba un
aspecto aun mas temible y Gala se quedo mirándole durante unos segundos.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Tengo hambre –susurró Gala con timidez. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Tienes trabajo. Después comerás –dijo Neret serio y firme
mirándola fijamente a los ojos.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Gala asintió y se
acercó a él.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Tú primero. Si corres ya sabes donde
acabarás.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-En el suelo… –añadió Gala triste.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret guió a Gala
por los pasillos y finalmente salieron a una gran explanada de tierra por una
puerta de madera más pequeña que la principal. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Sígueme –ordenó Neret.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Gala miró a su
alrededor. Había soldados practicando con espadas en un recinto hecho con
vallas de madera vieja, también había hombres limpiando caballos y llevando
armaduras de una pequeña cuadra al interior del castillo. Ahora entendía por
qué Neret la dejó caminar detrás de él sin importarle, sin mirar hacia atrás.
No tenía escapatoria. Había demasiados soldados y las murallas de la fortaleza
eran altísimas. Así que no le quedó más remedio que obedecer. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Entra –dijo Neret después de abrir la puerta de una pequeña
caseta de piedra -. Coge eso –añadió señalando a un cubo que tenía agua y a un
trapo que parecía estar limpio.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué voy a hacer con esto? –preguntó Gala sorprendida.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret no contestó a
su pregunta y se limitó a sentarse en un unas vigas que hacían de banco al lado
de una de las ventanas. Gala no dejaba de mirarle así que él sin decir nada se
dio con la mano unos toques en la pierna izquierda para que ella se sentará y
le dedicó una sonrisa traviesa a la vez que feroz. Ella se acercó despacio y se
sentó en su pierna con el cubo y el trapo en la mano.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Y ahora? –preguntó Gala.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret levanto por un
instante los ojos como si quisiera mirar a su ceja izquierda y volvió a centrar
la mirada en la chica.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Está bien –dijo resignada.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Gala empapó el
trapo en agua y comenzó a limpiarle con delicadeza la sangre seca que había en
su cara. Fue entonces cuando se fijó realmente en todos sus rasgos. Tenía una
melena negra y más bien lisa que le llegaba unos tres centímetros por debajo del pecho, también barba de pocos días que le
hacía aun más atractivo y resaltaba su mandíbula algo ancha y perfecta, sus
ojos eran de un tono azul oscuro, tan oscuro como un día de tormenta. Sus
labios eran más bien gruesos, daban ganas de besarlos. A juzgar por la ropa
ajustada de cuero Gala diría que es musculoso y sin duda, con una gran espalda.
Lucía un collar de plata que se ensanchaba simétricamente desde el broche hasta
llegar a una piedra ovalada, negra y muy brillante.</div>
<div class="MsoNormal">
Quedó
embelesada por completo y entonces decidió hablar.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué vas a hacer conmigo? –preguntó con cara inocente
mientras continuaba limpiándole.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Nada. Son mis hombres los que harán contigo lo que quieran
–respondió serio.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
No era la respuesta
que Gala quería escuchar, llevaba mucho tiempo rechazando hombres y no
consentiría que unos desconocidos hicieran con ella lo que quisieran.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Ningún hombre a mandado sobre mi nunca –dijo -. No dejes
que me toquen…<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Gala paró de
limpiarle la sangre y le miró fijamente a los ojos para después agachar la
mirada.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Hagamos un trato –sugirió Neret quitándole el trapo a Gala
-. Tú me obedeces y yo te protejo. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret comenzó a
limpiar la sangre que tenía Gala en la cabeza por culpa de su golpe y cuando
terminó la miró a los ojos.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Trato hecho? –preguntó.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Si, trato hecho.<o:p></o:p></div>Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-78805256586926655632012-07-14T21:10:00.001+02:002012-07-14T21:12:43.701+02:00Seis<span style="background-color: white;"> Tras un largo
camino, Gala, Neret y sus doce soldados llegaron al anochecer a la fortaleza
Drukan, situada en el reino del norte donde Neret lideraba.</span><br />
<div class="MsoNormal">
<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Gala bajó de Leteo con ayuda de Draian ya que seguía con las
manos atadas. Nada más pisar el suelo miró el camino que habían seguido hasta
detenerse, pero este desaparecía entre las sombras de la noche dando
importancia al cielo levemente anaranjado en el horizonte, por encima de las
muchas montañas que habían dejado atrás. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="http://2.bp.blogspot.com/-6KuFCXK_05w/UAHD79gO4PI/AAAAAAAAAC4/zubFQiCF1Ng/s1600/1.jpg" imageanchor="1" style="background-color: white; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" height="267" src="http://2.bp.blogspot.com/-6KuFCXK_05w/UAHD79gO4PI/AAAAAAAAAC4/zubFQiCF1Ng/s400/1.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Neret llevó a Leteo
a un edificio de piedra y madera que parecía ser una cuadra a juzgar por el
suelo lleno de paja y las armaduras para caballos que se dejaban ver a través
de la gran puerta de madera colgadas en una pared.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Vive para él y para su reino –dijo Draian a Gala al
observar como miraba a Neret.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿A que te refieres? –preguntó ella.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-A Leteo. Para él no es solamente un caballo.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret apareció por
detrás de Gala cortando la conversación con Draian y agarrándola por una muñeca
la hizo caminar hasta la puerta del castillo.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Llévala a lo que serán sus nuevos aposentos –le ordenó al
guardia que estaba firme en la puerta.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
El soldado asintió
con la cabeza a su líder y se llevó a Gala por los pasillos agarrándola de las
cuerdas que ataban sus manos.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-No le hagas daño –dijo Draian dirigiéndose a Neret.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Draian, eres mi mano derecha y mi mejor amigo desde hace
muchos años, por eso deberías conocerme mejor que nadie y saber que no la
tocaré. Ni a ella ni a ninguna otra.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Te conozco mejor que bien, por eso estoy seguro de que si
que la tocarás.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret frunció el
ceño, no entendía lo que Draian le quería decir, siempre era demasiado sutil y
enigmático.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Neret, he visto sus ojos, y he visto su corazón. En ella
está tu liberación.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Parece una buena chica, pero no es diferente a las demás.
No me liberará de mi carga –dijo Neret mientras entraba en su castillo y se
alejaba.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Si lo hará… -susurró Draian a pesar de que Neret ya no
podía escucharle.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Pasadas las horas, las
palabras de Draian no se iban de la cabeza de Neret, y este daba vueltas en su
cama sin poder dormir. Se preguntaba así mismo que le ocurría, no podía dejar
de pensar en esa chica de pelo anaranjado. Una voz dentro de su cabeza le decía
que fuera a verla a su habitación para asegurarse de que estaba allí. Y eso
hizo, no quería arriesgarse a perderla.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Entró en más de veinte
habitaciones y en ninguna estaba, así que fue a la puerta del castillo en busca
del guardia al que le ordenó llevarla a sus aposentos.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Dónde esta Gala? –preguntó al soldado.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-No sé quien es Gala señor.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-La chica que te entregué hace horas con las manos atadas.
¿Dónde está?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-La llevé a las mazmorras, como ordenasteis.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Te ordené que la llevaras a sus aposentos –gritó. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Lo siento… Creí que bromeabais, como tenía las manos
atadas… Yo… Lo siento señor… -tartamudeó el soldado.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-No quiero que vuelva a ocurrir.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret se apresuró a
entrar en el castillo y después de recorrer tres pasillos bajó unas escaleras
de piedra en forma de caracol para llegar a las mazmorras y comenzó a abrir
todas las puertas de los calabozos hasta que la encontró. Allí estaba, con las
manos atadas a la pared con una cadena de hierro. Estaba encogida, con la
cabeza apoyada en la pared. Tenía los ojos cerrados y su melena ondulada y
alborotada por la humedad caía por delante de sus hombros tapándole la cara en
su mayor parte.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Gala? –dijo Neret para asegurarse de que estaba dormida.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
No tuvo respuesta
por lo que se acercó a ella y se agachó para estar a su nivel. Le apartó el
pelo de la cara con suavidad y se lo puso por detrás de la oreja, mostrando así
la piel pálida de su cara.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Eres preciosa –susurró.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
En ese momento Gala
abrió los ojos y se quedó quieta y asustada al ver a Neret agachado a su lado.
Se había quedado dormida de agotamiento, ella solo pensaba en como escapar de allí.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Siento que estés aquí, se supone que debían haberte llevado
a una habitación donde podrías descansar en unas buenas condiciones, pero hubo
un malentendido –dijo mientras le quitaba los grilletes.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Gala quería salir
corriendo, pero pensó que no era un buen momento, así que actuó de la forma más
normal que pudo.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-No importa –contestó con voz dulce.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Te llevaré a tu habitación. Sígueme.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Gala se levantó del
suelo húmedo y caminó en silencio detrás de Neret por los pasillos oscuros.
Cuando llegaron a las escaleras de caracol Gala vio apoyado en la pared un palo
grueso de madera de unos cincuenta centímetros. No dudo en cogerlo y mientras
Neret subía ella le pegó con fuerza en la espalda, pero no con la fuerza
suficiente como para que le doliera siquiera. Neret se dio la vuelta rápidamente
y ella volvió a golpearle haciéndole una brecha en la ceja izquierda.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-Te arrepentirás de esto –dijo Neret.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Ella soltó el palo y
empezó a correr por los pasillos de las mazmorras, pensando que encontraría una
salida, pero Neret corrió detrás de ella. No le costó ningún esfuerzo alcanzarla,
y cuando la tenia delante la agarró por el pelo y la tiró al suelo poniéndose encima
de ella como si estuviera sentado para que no pudiera levantarse.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
-¡Suéltame! –grito Gala -. No tienes ningún derecha a… <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Neret cortó su frase
pegándola en la cara. La cabeza de Gala pegó contra las piedras del suelo y la
dejó inconsciente, así que la cogió en brazos y la metió de nuevo a su celda. Se
tocó la ceja con los dedos de la mano y fue entonces cuando se dio cuenta de
que estaba sangrando. Cerró la puerta del calabozo con llave y miró a través de
los barrotes a Gala. Recordó de nuevo las palabras de Draian y cerró los ojos
para darse la vuelta y volver a su habitación.<o:p></o:p></div>Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-25526931661693608922011-10-14T00:21:00.001+02:002011-10-14T00:23:44.124+02:00Cinco Neret ordenó a un soldado que cuidaba la puerta principal del castillo que le llevara ante Reyen. Hablaba decidido, sin ningún temor, parecía que tenía todo controlado. Empezó a seguir al soldado por los amplios pasillos de techos altos sin bajarse de su caballo. A Gala todo le resultaba muy atrevido, pensaba que Reyen les mataría. El soldado les abrió la puerta de un comedor en el que las mesas estaban colocadas en forma de U. Reyen como siempre estaba al fondo, en un sitio en el que destacaba por encima de todos los que cenaban con él.<br />
<div class="MsoNormal">-Buenas noches –dijo Neret mirando fijamente a Reyen.</div><div class="MsoNormal">-Bienvenido –dijo Reyen con sorpresa y pánico en los ojos mientras alejaba el plato del que comía.</div><div class="MsoNormal">-¿No te sorprendes de verme?</div><div class="MsoNormal">-Dijiste que nunca vendrías a mi reino –dijo mientras se situaba en el medio del comedor, delante de Neret.</div><div class="MsoNormal">-Y tú que ninguno de tus sucios semielfos entraría en mi territorio. Sin embargo, ha llegado a mis oídos que secuestraron a cinco mujeres en una pequeña villa.</div><div class="MsoNormal"> Reyen tragó saliva, no sabía como iba a reaccionar Neret y eso le aterrorizaba, ni siquiera había notado la presencia de Gala, que estaba escondida tras la espalda de su enemigo.</div><div class="MsoNormal">-Por cierto… mira lo que cacé –dijo mientras bajaba a Gala del caballo dejándola de rodillas en el suelo -. Al parecer uno de tus trozos de carne se escapó de tus mazmorras.</div><div class="MsoNormal"> </div><a href="http://1.bp.blogspot.com/-gOfIFIj8diQ/TpdjsU4m2hI/AAAAAAAAACs/Ish7dJFcjOE/s1600/280920113894.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="color: white;"><span style="background-color: white;"> </span> </span><img border="0" height="320" src="http://1.bp.blogspot.com/-gOfIFIj8diQ/TpdjsU4m2hI/AAAAAAAAACs/Ish7dJFcjOE/s320/280920113894.jpg" width="244" /></a><br />
<div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"> Alejandro, que estaba sentado en el comedor, levanto la vista rápidamente y frunció el ceño. Quería saltar la mesa y llevársela de allí, pero sabía que alguien moriría si lo intentaba. Así que esperó sentado a que su líder hablara.</div><div class="MsoNormal">-Gracias por traerla –dijo Reyen con voz desconfiada mientras se acercaba y la cogía por el cuello para levantarla.</div><div class="MsoNormal">-No te atrevas a tocarla –gritó Neret al mismo tiempo que le daba una patada en el pecho desde el caballo -. Perdiste ese derecho, si es que se puede llamar así, cuando logró salir del calabozo.</div><div class="MsoNormal"> Los soldados y jefes de estos, que estaban en la sala, se levantaron para atacar a Neret si Reyen lo ordenaba.</div><div class="MsoNormal">-Quietos –dijo Reyen a todos.</div><div class="MsoNormal">-Buena elección –dijo Neret con una pequeña sonrisa ladeada que dejaba ver un par de dientes perfectos y blancos -. No la has marcado. ¿Por qué?</div><div class="MsoNormal">-Tiene que quedarse aquí.</div><div class="MsoNormal">-Eso no responde a mi pregunta.</div><div class="MsoNormal">-Digamos que alguno de mis hombres sólo reacciona con este tipo de castigos.</div><div class="MsoNormal">-¿Ella sufre porque tus hombres no te obedecen?</div><div class="MsoNormal">-Está aquí porque la quiero aquí. Ahora es de mi propiedad –dijo muy inseguro de sí mismo. </div><div class="MsoNormal"> Neret echó a reír. </div><div class="MsoNormal">-Volverá a su casa. Mañana a primera hora.</div><div class="MsoNormal">-Ya no tiene casa. Mandé quemar todo cuanto poseía cuando me enteré de que había escapado. Así que tendrá que acostumbrarse a vivir aquí.</div><div class="MsoNormal"> Neret tiró de la cuerda que ataba las manos de Gala para acercarla a él y ayudarla a subir al caballo.</div><div class="MsoNormal">-Hasta la vista, Reyen –dijo mientras salía por la puerta.</div><div class="MsoNormal"> Alejandro hizo el amago de salir corriendo tras él, pero la mano de Reyen dio en su pecho un golpe en seco que le hizo detenerse.</div><div class="MsoNormal">-Hagamos un trato –sugirió Reyen a Neret.</div><div class="MsoNormal">-Yo no hago tratos con nadie que sea capaz de reinar así. Entre sangre y sufrimiento –dijo desde el pasillo.</div><div class="MsoNormal">-Disfruta de ella, pero tráela de vuelta. Quédatela un mes, dos… los que quieras. Pero devuélvemela. </div><div class="MsoNormal">-No volverá a pisar este lugar. Vendrá conmigo. Y por suerte para ella, yo no soy como tú.</div><div class="MsoNormal"> Neret salió del castillo. En la puerta principal esperaban sus soldados, quienes le siguieron rápidamente cuando vieron que salió de la fortaleza y se adentraba en el bosque.</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">-¿Por qué no le has matado? –gritó Alejandro -. Le tenías ahí, era tuyo.</div><div class="MsoNormal">-No todo es tan fácil como parece –dijo Reyen.</div><div class="MsoNormal">-Porque es el líder más temido, ¿no? ¡Lo seguirá siendo si nadie se enfrenta a él!</div><div class="MsoNormal">-¡Nadie le ha vencido! ¡Jamás! Siempre vence en sus peleas y batallas. Hacerle daño sólo traería la desgracia a mi reino y no pienso dejar que eso ocurra. Este es mi territorio y una pelea perdida por una simple mujer no hará que abandone lo que es mío. </div><div class="MsoNormal">-Te creía más luchador y menos cobarde.</div><div class="MsoNormal"> Al escuchar esas palabras Reyen ardió por dentro. Él era un líder que si quería algo, sin duda, lo conseguía. Odiaba parecer débil ante sus soldados, así que hizo lo que mejor se le daba, demostrar que merecía ser respetado.</div><div class="MsoNormal">-Cambio de planes –dijo a Alejandro y a los jefes de la sala tras unos minutos -. Olvidad todo lo que he dicho que hagáis.</div><div class="MsoNormal">-¿Eso incluye mi trabajo? –preguntó Alejandro.</div><div class="MsoNormal">-Si. Te ocuparás de mejorar las armas y armaduras. Y vosotros –dijo mirando al resto -. Quiero que todos os centréis únicamente en entrenar a mis soldados. Quiero que sean los mejores en todo.</div><div class="MsoNormal">-¿Qué planes tiene? –preguntó con respeto uno de los jefes.</div><div class="MsoNormal">-Primero traeré de vuelta a la chica, y después atacaremos el reino del norte. Tardaremos meses en prepararnos, así que empezar cuando antes.</div><div class="MsoNormal"> Reyen salió del comedor dando un portazo y entró de nuevo a los pocos segundos. Se paró en seco tras pasar la puerta y buscó con la mirada a Alejandro.</div><div class="MsoNormal">-Acuérdate del día en el que decidiste dejar este trabajo –le dijo.</div><div class="MsoNormal">-¿Por qué? –preguntó Alejandro.</div><div class="MsoNormal">-Porque eso ha hecho que una guerra empiece.</div>Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com13tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-38768593509146582582011-09-28T21:51:00.004+02:002012-07-15T03:51:41.373+02:00Cuatro Un hombre con armaduras oscuras agarraba las riendas de su caballo mientras rodeaba a Gala con los brazos para que no se cayera de este. La cabeza de Gala descansaba en su pecho y el pelo largo de ambos se mezclaba creando un color rojo oscuro. Después de galopar durante horas por un bosque inmenso, ella por fin abrió los ojos. <br />
<div class="MsoNormal">
-¡Suéltame! –gritó asustada al ver que tenía las manos atadas.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Suéltame? Te despiertas en un caballo, sin saber hacia donde se dirige, sin saber quien lleva las riendas y sin saber que pasó antes de quedarte inconsciente… ¿Y eso es todo lo que dices? -dijo riendo el hombre.</div>
<div class="MsoNormal">
-Me choqué con algo.</div>
<div class="MsoNormal">
-Exactamente con Leteo.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Leteo?</div>
<div class="MsoNormal">
-Mi caballo.</div>
<div class="MsoNormal">
-Bonito nombre… ¿Puedes soltarme?</div>
<div class="MsoNormal">
-Puedo.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala esperó un rato antes de decir nada, creyendo que en cualquier momento pararía el caballo y la soltaría, pero no fue así.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Y bien? –preguntó inquieta.</div>
<div class="MsoNormal">
-No voy a soltarte.</div>
<div class="MsoNormal">
-Pero dijiste que…</div>
<div class="MsoNormal">
-Que podía –dijo rápidamente -. No que fuese a hacerlo. </div>
<div class="MsoNormal">
-Bájame del caballo por favor, no puedes hacerme esto…</div>
<div class="MsoNormal">
-Si me lo pides así…</div>
<div class="MsoNormal">
El hombre hizo parar al caballo y la bajó, pero no la soltó, sino que ató otra cuerda a sus manos y la agarró con fuerza.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Estás más cómoda? -preguntó irónicamente mientras hacía que Leteo volviera a caminar despacio.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala frunció el ceño y sin decir nada comenzó a caminar.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué vas a hacer conmigo? –preguntó después de unos minutos con tristeza en la voz.</div>
<div class="MsoNormal">
-Nada.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Por qué me atas entonces?</div>
<div class="MsoNormal">
-Porque sólo así vendrás conmigo.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿A dónde? </div>
<div class="MsoNormal">
-Deja de hacer preguntas. Yo no te he hecho ninguna –dijo intentando ocultar la verdad.</div>
<div class="MsoNormal">
-Pregúntame lo que quieras…</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué hacías corriendo a esas horas de la noche en ese bosque?</div>
<div class="MsoNormal">
-Estaba escapando.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Escapando? –preguntó serio mientras mandaba parar a Leteo.</div>
<div class="MsoNormal">
-Me encerraron en un calabozo, pero conseguí escapar gracias a una chica –contestó mientras miraba el brazalete que ella le dio. </div>
<div class="MsoNormal">
El hombre bajó del caballo, apartó el pelo del cuello a Gala y tras ver una piel perfecta la miró fijamente.</div>
<div class="MsoNormal">
-No me hagas daño… -suplicó ella.</div>
<div class="MsoNormal">
-No te han marcado.</div>
<div class="MsoNormal">
-No te entiendo. ¿Cómo que marcado?</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Se llamaba Reyen?</div>
<div class="MsoNormal">
-Si… ¡Eres uno de ellos! –gritó mientras tiraba de la cuerda para soltarse.</div>
<div class="MsoNormal">
-¡No! Tranquila, no voy a hacerte daño –dijo mientras le agarraba los brazos -. Reyen tiene una marca en el cuello, una S, indica que es un semielfo. Todos los que le sirven tienen esa marca, incluidas las chicas que encierra allí. A eso me refiero. ¿Te hizo daño?</div>
<div class="MsoNormal">
-Eso ya no importa, ahora solamente quiero volver a casa. Por favor suéltame…</div>
<div class="MsoNormal">
-No puedo, tengo que…</div>
<div class="MsoNormal">
Un ruido le interrumpió. Gala se dio la vuelta y vio a doce soldados acercándose a caballo.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Quiénes son? ¿Qué buscan? –preguntó Gala nerviosa.</div>
<div class="MsoNormal">
Él no contestó. Se puso tenso y movía los ojos sin centrarse en un punto fijo, como si estuviera pensando en algo importante, tomando una decisión.</div>
<div class="MsoNormal">
-Hemos encontrado el camino –le dijo uno de los hombres. </div>
<div class="MsoNormal">
-Bien, pues vamos –dijo serio.</div>
<div class="MsoNormal">
Al fondo había una figura élfica que llamó la atención de Gala porque no quitaba sus intensos ojos verdes de encima de ella. Se sintió intimidada y entonces él se acercó y se presentó.</div>
<div class="MsoNormal">
-Hola, me llamo Draian –dijo con una sonrisa encantadora y serena.</div>
<div class="MsoNormal">
-Yo soy Gala.</div>
<div class="MsoNormal">
-Supongo que nuestro líder Neret se ha presentado, ¿verdad? </div>
<div class="MsoNormal">
-No… -respondió con timidez. </div>
<div class="MsoNormal">
Draian echó una mirada al hombre de las armaduras oscuras con el que ella había estado hablando desde que abrió los ojos y entonces este habló.</div>
<div class="MsoNormal">
-Yo soy Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
-Espero que haya estado estas horas un poco más comunicativo contigo Gala –dijo Draian.</div>
<div class="MsoNormal">
-Nos vamos –dijo Neret con el ceño fruncido mientras subía a su caballo -. Llévala tú Draian.</div>
<div class="MsoNormal">
Draian subió a Gala al caballo y le guiñó un ojo. Sin duda ella pensaba que él era una buena persona, pero también lo pensó de Alejandro… </div>
<div class="MsoNormal">
-¿Puedo preguntarte algo Draian? –le dijo cuando se pusieron en camino.</div>
<div class="MsoNormal">
-Claro –contestó.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué hará conmigo?</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Neret? No te preocupes, él hace años que no toca a una mujer y menos si ella no le da su consentimiento.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Por qué?</div>
<div class="MsoNormal">
-Porque es un gran líder.</div>
<div class="MsoNormal">
Gala permaneció en silencio hasta que reconoció la fortaleza de Reyen. Estaba allí de nuevo y pensar en todo lo que había pasado dentro de esos muros hizo que un escalofrío le recorriese el cuerpo.</div>
<div class="MsoNormal">
-Parar –ordenó Neret.</div>
<div class="MsoNormal">
Se acercó rápidamente a Gala, la bajo del caballo y volvió a montarse en Leteo con ella.</div>
<div class="MsoNormal">
-Neret, no lo hagas –dijo Draian -. Te arrepentirás toda tu vida.</div>
<div class="MsoNormal">
-Lo sé –contestó.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Gala no sabía de qué hablaban, pero estaba segura de que no era bueno para ella. Los ojos azules de Neret se clavaron en los suyos, eso le dio cierta sensación de protección, pero se había puesto tan serio de un momento a otro que no dejaba de pensar que iba a entregarla a Reyen. Neret entró en la fortaleza sin dudar un segundo, ahora el destino de Gala dependía de él.</div>Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-41271626912334552472011-09-25T18:19:00.001+02:002011-09-25T18:20:00.129+02:00Tres Gala fue arrastrada por los pasillos de los calabozos hasta que finalmente la empujaron a una mazmorra húmeda y oscura. Los dos soldados se acercaron a ella y mientras uno le soltaba las manos, el otro le rasgaba su largo vestido blanco, convirtiéndolo en una especie de camisón corto y ajustado en la cintura, tal y como había pedido Reyen, “verla con una ropa más apropiada”, más apropiada para agradar a sus ojos. Después cerraron la puerta de barrotes negros y se alejaron por el mismo camino.<br />
<div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/-8ANvH6CH6us/Tn9TfZaBofI/AAAAAAAAACk/tY7li36afGU/s1600/7294500-antiguo-t-nel-de-castillo-con-escaleras-que-conducen-al-calabozo.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="http://1.bp.blogspot.com/-8ANvH6CH6us/Tn9TfZaBofI/AAAAAAAAACk/tY7li36afGU/s400/7294500-antiguo-t-nel-de-castillo-con-escaleras-que-conducen-al-calabozo.jpg" width="265" /></a></div><div class="MsoNormal"> </div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"> -Veo que habéis terminado vuestro trabajo –dijo Reyen a los dos soldados que acababan de entrar en la sala. </div><div class="MsoNormal"> Ellos asintieron con la cabeza al mismo tiempo y se pusieron firmes junto a la puerta. </div><div class="MsoNormal">-Bien hecho – dijo mirando las telas rasgadas del vestido de Gala que uno de ellos llevaba en la mano. </div><div class="MsoNormal"> Alejandro respiró profundamente, agachó la cabeza y cerró los ojos por unos segundos.</div><div class="MsoNormal">-Deja de culparte, de ser débil, de llorar y de arrepentirte –le dijo Reyen -. Mis soldados no hacen eso. ¿Está claro?</div><div class="MsoNormal">-Yo no soy un soldado –contestó mientras levantaba la cabeza.</div><div class="MsoNormal">-Eres un hombre inteligente, por eso eres mi mano derecha. Sé que sabes lo que te conviene hacer. </div><div class="MsoNormal">-Háblame de ese trabajo –dijo Alejandro mientras miraba a un punto fijo en el suelo.</div><div class="MsoNormal">-Quiero que vayas al norte, a Siliot. </div><div class="MsoNormal">-¿A Siliot? –preguntó sorprendido -. ¿Qué hay allí? Sólo es una pequeña aldea. </div><div class="MsoNormal">-Planeo atacarla. Averigua si Neret la defiende o sólo es una aldea abandonada en los alrededores de su reino.</div><div class="MsoNormal">-Neret jamás protege sus tierras. </div><div class="MsoNormal">-¿Cómo lo sabes?</div><div class="MsoNormal">-Es obvio, él es el líder más temido, nadie le ataca así que no tiene que defender nada. </div><div class="MsoNormal">-Puede que tengas razón, pero quiero estar seguro. Partirás dentro de dos días.</div><div class="MsoNormal"> Alejandro asintió con la cabeza y avanzó hacia la puerta de la sala.</div><div class="MsoNormal">-No vuelvas a tocarla –le gritó a un soldado mientras le quitaba de las manos los trozos del vestido de Gala.</div><div class="MsoNormal">-No des órdenes a mis soldados –dijo Reyen -. Quieres dejar tu trabajo así que ahora no eres más que ellos.</div><div class="MsoNormal">-Entonces puede ir a Siliot cualquier otro, ¿no? </div><div class="MsoNormal">-Que hagas mejor tu trabajo no quiere decir nada.</div><div class="MsoNormal">-De acuerdo… Si no quieres que les de ordenes, dáselas tú –dijo mientras abría la puerta -. Ordénale que no vuelva a tocarla.</div><div class="MsoNormal"> Alejandro salió de la sala y golpeó la pared del pasillo en un ataque de ira. Sabía que estaba perdiendo el respeto y la protección del líder, y eso le perjudicaría mucho. Reyen acabaría utilizándole y dejaría de tratarle como a un hermano. Mientras él salía de la fortaleza para respirar aire puro, Gala se ahogaba entre cuatro paredes. Estaba sentada, con la espalda apoyada en la pared del fondo. Intentaba encontrar una forma de abrir la puerta y salir corriendo, de escapar de ese lugar. Descansó la cabeza echándola hacia atrás y fue entonces cuando vio una pequeña ventana en lo alto de la pared. Se levantó corriendo y empezó a saltar para comprobar si llegaba a agarrarse a los dos barrotes que tenía, pero estaban demasiado altos. Al momento escuchó unos gritos, por suerte para Gala las paredes tenían en el medio un insignificante agujero desde el que se podía ver el calabozo que estaba al lado. Miró y vio a una chica, tenía la piel sucia y su pelo negro estaba revuelto.</div><div class="MsoNormal">-Hola –le susurró Gala cuando los guardias se alejaron.</div><div class="MsoNormal">-¿Te acaban de encerrar? –le preguntó con una pequeña sonrisa. </div><div class="MsoNormal">-Si. Parece que te alegras de ello…</div><div class="MsoNormal">-Lo siento… Hace mucho tiempo que no hablo con nadie…</div><div class="MsoNormal">-¿Cuánto tiempo llevas aquí?</div><div class="MsoNormal">-Seis meses.</div><div class="MsoNormal"> A Gala se le encogió el corazón, sabía que ella no aguantaría tanto tiempo.</div><div class="MsoNormal">-Tengo miedo –dijo Gala</div><div class="MsoNormal">-Yo también lo tenia la primera vez que me encerraron aquí.</div><div class="MsoNormal">-¿Ahora ya no?</div><div class="MsoNormal">-No… Porque lo que te hacen cuando sales de estas cuatro paredes es mucho peor que estar aquí sola encerrada…</div><div class="MsoNormal">-¿Has intentado escapar?</div><div class="MsoNormal">-No se puede salir de aquí. La única posibilidad es la ventana, pero algunas tienen demasiados barrotes.</div><div class="MsoNormal">-Esta ventana tiene dos.</div><div class="MsoNormal">-¿Sólo dos? –le preguntó extrañada -. No he visto ninguna que tenga menos de cuatro.</div><div class="MsoNormal">-Está demasiado alta así que tampoco importa cuantos barrotes tenga.</div><div class="MsoNormal">-Intenta agarrarte en las piedras de la pared. Esta será la única oportunidad que tendrás para escapar.</div><div class="MsoNormal"> Gala probó a hacer lo que la joven le había dicho, pero era mucho más difícil de lo que pensaba. Se cayó al suelo muchas veces, haciéndose heridas en las manos, pero en su mente sólo había lugar para las palabras de la chica, “esta será la única oportunidad que tendrás para escapar”, así que lo siguió intentando hasta que finalmente alcanzó un barrote. </div><div class="MsoNormal">-¡Ya está! –dijo Gala.</div><div class="MsoNormal">-Ahora intenta…</div><div class="MsoNormal"> Un gran ruido cortó sus palabras. Gala se cayó al suelo junto con el barrote del que estaba prácticamente colgada.</div><div class="MsoNormal">-¿Estás bien? –le preguntó la chica.</div><div class="MsoNormal">-Si, estoy bien.</div><div class="MsoNormal"> Se escucharon unos pasos por el pasillo y Gala escondió el barrote detrás de ella.</div><div class="MsoNormal">-¿Qué ha sido ese ruido? –le preguntó un soldado.</div><div class="MsoNormal">-No he escuchado nada –mintió Gala.</div><div class="MsoNormal"> El soldado frunció el ceño y se alejó despacio. Gala respiró profundamente y volvió a intentar agarrarse al barrote de la ventana.</div><div class="MsoNormal">-Apóyate en el muro, suelta el barrote –susurró la chica.</div><div class="MsoNormal"> Así lo hizo Gala y a los pocos minutos pudo sacar su cuerpo al exterior. La ventana estaba a ras del suelo y se manchó el cuerpo con la tierra húmeda. Luego se agachó para mirar hacia dentro por la ventana y miró a la chica con tristeza.</div><div class="MsoNormal">-¿Cómo te llamas? –le preguntó Gala.</div><div class="MsoNormal">-Selene –contestó.</div><div class="MsoNormal">-Gracias Selene, no lo habría conseguido sin ti… -le dijo -. ¿Puedo hacer algo para ayudarte?</div><div class="MsoNormal">-Toma –le dijo mientras se quitaba un brazalete de cobre y se lo lanzaba -. Si alguna vez pasas por Lutiat dáselo a mi madre, se llama Mireia. </div><div class="MsoNormal">-Te prometo que lo haré.</div><div class="MsoNormal">-Ahora corre –susurró -. No dejes que te cojan. Si lo hacen te matarán…</div><div class="MsoNormal">-Gracias… -dijo de nuevo Gala.</div><div class="MsoNormal"> Selene le dedicó una pequeña sonrisa y ella se alejó entre los matorrales hasta adentrarse en un bosque. La luz de la luna no era suficiente para ver donde pisaba y las sombras de los árboles le aterraban. Después de correr durante minutos sin descanso, su corazón comenzó a latir rápidamente al escuchar unos pasos de caballo. Intentó correr más deprisa mientras miraba cada poco el camino que dejaba atrás y derepente se golpeó en la cabeza con algo duro pero de tacto suave. Se cayó al suelo húmedo y antes de quedarse inconsciente sólo pudo ver una imagen borrosa de un caballo negro y a un hombre con armaduras acercándose a ella con decisión.</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/-tAWQgEGkBuw/Tn9ULqskD0I/AAAAAAAAACo/0d1cbal2Ch8/s1600/Bosque_Cajonos.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="265" src="http://3.bp.blogspot.com/-tAWQgEGkBuw/Tn9ULqskD0I/AAAAAAAAACo/0d1cbal2Ch8/s400/Bosque_Cajonos.JPG" width="400" /></a></div><div class="MsoNormal"><br />
</div>Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-61793993688046642382011-09-18T16:04:00.000+02:002011-09-18T16:04:52.381+02:00Dos<!--[if !mso]> <style>
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</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Al amanecer se pusieron en camino montando los dos en el caballo de Alejandro. </div><div class="MsoNormal">-¿Cuánto tardaremos en llegar? –preguntó Gala.</div><div class="MsoNormal">-No puedo decirte nada.</div><div class="MsoNormal">-¿Por qué no? Ni que me llevaras a una muerte segura –bromeó.</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Alejandro guardó un largo silencio antes de responder.</div><div class="MsoNormal">-Ya te dije que era una sorpresa. </div><div class="MsoNormal">-Pero sólo quiero saber…</div><div class="MsoNormal">-Mucho –la cortó Alejandro –queda mucho para llegar. No esperes estar allí antes de que oscurezca.</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Gala pensó por un instante que algo malo iba a pasar, pero la armonía del bosque por el que estaban cabalgando hizo que dejara de lado esos pensamientos. Así que se aferró a la espalda de Alejandro apoyando su cabeza en ella y haciéndole estremecer.</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/-n0Gn0mpBi4A/TnXzLvKoagI/AAAAAAAAACU/dCZ6obnxVEs/s1600/cielo+en+llamas.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="300" src="http://1.bp.blogspot.com/-n0Gn0mpBi4A/TnXzLvKoagI/AAAAAAAAACU/dCZ6obnxVEs/s400/cielo+en+llamas.jpg" width="400" /></a></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Al fin llegaron, como dijo Alejandro, no antes de haber oscurecido. Gala miraba a su alrededor desconcertada, se preguntaba quién viviría en ese lugar.</div><div class="MsoNormal">-Bueno, ya estamos aquí –dijo Alejandro después de respirar profundamente.</div><div class="MsoNormal">-¿Qué vamos a hacer en este lugar? –preguntó Gala.</div><div class="MsoNormal">-Aquí vive un viejo amigo, quiero que le conozcas.</div><div class="MsoNormal">-¿Por qué?</div><div class="MsoNormal">-Porque es importante para mi –respondió después de pensar unos segundos.</div><div class="MsoNormal">-¿Es importante para ti que conozca a un amigo tuyo? –dijo riendo -. De acuerdo, le conoceré encantada, pero dime que esta no era la sorpresa…</div><div class="MsoNormal">-Tendrás tu sorpresa mañana, en cuanto nos vayamos de este lugar –le prometió.</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Gala le miró entusiasmada. </div><div class="MsoNormal">-¿Entramos? –preguntó Alejandro mientras señalaba con la cabeza el edificio fortificado.</div><div class="MsoNormal">-Hemos venido hasta aquí para eso –contestó Gala mientras empezaba a caminar hacia la enorme puerta de madera, en la que había a cada uno de los lados un soldado armado.</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Alejandro dirigió a Gala por los pasillos hasta llegar a la sala principal, donde Reyen estaba la mayor parte de su tiempo sentado en su trono, dedicándose básicamente a dar ordenes al resto. </div><div class="MsoNormal">-Bienvenida Gala –dijo Reyen mirándola de arriba a abajo nada más que entró en la sala detrás de Alejandro.</div><div class="MsoNormal">-Te presento a Reyen –dijo Alejandro antes de que Gala pudiera hablar.</div><div class="MsoNormal">-Encantada –susurró Gala con timidez.</div><div class="MsoNormal">-No te escondas detrás de Alejandro. Acércate –le pidió Reyen.</div><div class="MsoNormal" style="tab-stops: 273.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Alejandro hizo un amago de agarrar el brazo de Gala para que no diera ni un paso, pero no quería mostrar miedo, así que la dejó avanzar hasta el medio de la sala, donde ella se detuvo y se dio media vuelta por un instante para mirarle. Sobró tiempo para que Reyen levantara la mano y apuntara con dos dedos hacia Gala. En ese instante dos soldados se dirigieron a ella y le ataron las manos. Alejandro corrió a defenderla, pero otro soldado le golpeó en la cabeza y le agarro con fuerza. </div><div class="MsoNormal">-¡Dijiste que no sufriría! –grito colérico Alejandro.</div><div class="MsoNormal">-Y no sufrirá. No demasiado –dijo Reyen.</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Gala estaba aterrorizada, no entendía nada y sólo miraba fijamente hacia Alejandro con pánico en los ojos.</div><div class="MsoNormal">-¡Eres un líder pésimo! –dijo Alejandro</div><div class="MsoNormal">-No. Soy un líder que sabe lo que quiere y como conseguirlo. Ahora harás el trabajo que tengo para ti y además la tengo a ella –dijo Reyen mientras hacia que Gala se arrodillara en el suelo delante de él.</div><div class="MsoNormal">-¡No lo haré! ¡No haré nada!</div><div class="MsoNormal">-Créeme, si lo harás. Dudo que quieras ver a tu querida Gala en mi sala de tortura.</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Hubo un silencio inquietante. Gala no se atrevía a decir nada y Alejandro la miraba con los ojos llorosos.</div><div class="MsoNormal">-Dime Gala, ¿te ha dicho Alejandro quien es en realidad? ¿Te gustaría saberlo? –dijo Reyen.</div><div class="MsoNormal">-¡No! Por favor… -susurró Alejandro, temiendo perderla.</div><div class="MsoNormal">-Él no es más que la persona que trae a chicas como tú aquí, para que mi ejército y yo hagamos lo que queramos con ellas. </div><div class="MsoNormal">-¿Es eso cierto? –preguntó Gala.</div><div class="MsoNormal">-Lo siento… -contestó Alejandro -. No quería que nada de esto pasara…</div><div class="MsoNormal">-Mejor que haya pasado –le interrumpió -. Al menos ahora se la verdad, sé quien eres…</div><div class="MsoNormal">-Haré lo que quieras Reyen… pero no le hagas daño… -dijo Alejandro.</div><div class="MsoNormal">-Comencemos a hablar de negocios –dijo Reyen con una sonrisa malvada en la cara -. Llevad a Gala a los calabozos y la próxima vez que la vea espero que tenga una ropa más apropiada.</div><div class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Los soldados asintieron y se la llevaron entre gritos. Ahora Gala solo tenía un objetivo, escapar de ese lugar. </div>Enmethttp://www.blogger.com/profile/16620125232566873995noreply@blogger.com13tag:blogger.com,1999:blog-2792573165591791615.post-91392818532767154912011-09-16T01:00:00.007+02:002011-09-18T16:07:07.409+02:00Uno<div class="MsoNormal"> Las corazas color cobre de aquel caballo negro reflejaban el sol de la madrugada. Su profunda respiración era para Gala un estruendo en su cabeza. Agachada debajo de un carro de paja escuchaba gritos y veía espadas llenas de sangre.<br />
-¡Rápido! Quemad las casas y matad a los prisioneros. ¡Aquí no está! Perdemos el tiempo. –gritó el hombre del caballo a sus soldados.<br />
Tenía una armadura oscura y su piel no se dejaba ver más que alrededor de los ojos, a través de un casco que le hacia aún más temible.<br />
La aldea de Gala fue destruida en apenas unos minutos. Todo lo que conoció en sus ocho años de vida estaba ahora hecho cenizas. Era demasiado pequeña para saber que buscaban, pero no para sentirse sola, confundida y aterrorizada. Una familia la acogió tres días después de la masacre, cuando se enteraron de que sus padres habían sido asesinados. Tal vez no se diera cuenta, pero su destino tenia mucho que ver con aquellos soldados a los que con todas sus fuerzas quiso olvidar en los próximos nueve años.</div><div class="MsoNormal"><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/-P31F_Jypm4w/TnNwxdq4TkI/AAAAAAAAABk/ArJlTeIJSH8/s1600/llamas.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="296" src="http://1.bp.blogspot.com/-P31F_Jypm4w/TnNwxdq4TkI/AAAAAAAAABk/ArJlTeIJSH8/s400/llamas.jpg" width="400" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"></div><br />
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</div><div class="MsoNormal"></div><div class="MsoNormal"></div><div class="MsoNormal"> Gala se había hecho toda una mujer a pesar de sus diecisiete años de juventud. Era una chica humilde, de gran corazón. Pero era más conocida por su valentía y coraje. Ansiaba la libertad y nada la detenía si quería algo. Alejandro, un hombre fuerte pero de apenas veintidós años fue quien la protegió siempre y se ganó su confianza. Su pelo era oscuro como la noche y sus ojos de un color miel apagado. Gala siempre los envidió.<br />
-¿Cuándo te dejarás domar? –dijo riendo Alejandro mientras saltaba la valla de la casa de Gala- He visto como te ofrecían compromiso de nuevo.<br />
-Estar atada no es lo mío, además, ¿Qué felicidad puede surgir al entregarte a quien no amas?<br />
-Tal vez si te abrieras a alguien descubrirías que le quieres… ¿no crees?<br />
-Puede ser, de todas formas ya sabes que…<br />
-Si, lo se –la cortó rápidamente- puedes valerte por ti misma desde que la familia que te acogió te abrió la puerta para que salieras a buscarte la vida.<br />
-No es sólo buscarme la vida. Es ser algo más.<br />
-¿Algo más?<br />
-Si, tener una historia que contar. Tener una vida distinta a la del resto. Ser una leyenda.<br />
-Está bien, si es lo que deseas adelante –dijo mientras le dedicaba una sonrisa como dándole la razón a una niña pequeña- los dos sabemos que una mujer luchando en batalla no es lo más apropiado. Te gustaría alzar una espada para defender la justicia, pero no puedes cambiar años de tradición sólo porque que creas que es algo emocionante. Un campo de batalla no es lugar para una dama y menos aún si esa dama es tan frágil como tú.<br />
-¿Vienes? –preguntó una voz cortante a Alejandro desde un caballo-<br />
-Por supuesto Reyen –contestó con firmeza- Gala tengo que irme, estaré de vuelta en unos días.<br />
Ella nunca entendía el por qué de sus viajes, ¿por qué desaparecía siempre unos días a la semana? Él nunca se lo quiso explicar así que solamente asintió con la cabeza mientras miraba al hombre del caballo, quien lucía media melena de un rubio oscuro. Los rasgos de su cara eran sin duda armoniosos, pero dentro de esa armonía había algo inquietante que mostraba en su mirada. Tenía unos ojos profundos y oscuros. Se quedo hipnotizada con esa mirada que no se apartaba de ella.<br />
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Se alejaron galopando por el camino de tierra que levantaba polvo a su paso. Al caer la noche llegaron a la fortaleza donde Reyen y su ejercito se refugiaban. Reyen era un hombre poderoso, dominaba toda la parte sur de la península. Era un líder voluble excepto por su afán de conseguir poder.<br />
Dejaron los caballos y recorrieron cuatro pasillos hasta llegar a la sala principal, donde se veía al fondo un gran trono de color oro y terciopelo rojo. A los lados de la sala había mesas largas y bancos de madera oscura en los que estaban sentados bebiendo vino los jefes de batería del ejercito de Reyen. Los azulejos blancos y negros del suelo daban sensación de frío y las lámparas de araña alumbraban la sala, junto con la tenue luz de la luna que entraba por los ventanales.<br />
-Tengo un nuevo encargo para ti, Alejandro –dijo Reyen mientras se sentaba en el trono.<br />
-Te dije que quería acabar con esto. No quiero seguir –protestó.<br />
-Y yo te dije que no puedes dejarlo si no quieres acabar muerto. Eres mi mano derecha, mi fiel mensajero e intermediario…<br />
-¡Lo que hacemos no está bien! –dijo con ira Alejandro cortando la palabra a Reyen-. Secuestrar mujeres para tenerlas de esclavas, intercambiarlas como si fuesen animales… No quiero que pese en mi conciencia durante el resto de mi vida.<br />
-Llegas tarde para eso ¿no crees? Pesará en tu conciencia, lo dejes ahora o no.<br />
-Nunca es tarde para hacer lo correcto<br />
-Es esa mujer –dijo entre carcajadas Reyen-. Te ha robado el corazón con sus encantos y ahora quieres ser el hombre perfecto. Pero por dejar esto no vas a ser más noble. Lo hecho, hecho está.<br />
-No metas a Gala en esto –rugió a Reyen.<br />
-Gala, así que ese es su nombre… -dijo con voz interesada.<br />
Reyen se quedó en silencio durante unos segundos mientras Alejandro estaba de pie en el medio de la sala.<br />
-Te propongo algo –dijo Reyen con voz misteriosa-. Tráela aquí, a mi fortaleza. Si lo haces…eres libre.<br />
-¡No! ¡Jamás! –gritó-. Nunca te entregaré a Gala. No se lo merece y yo sería incapaz de hacer algo malo para ella. Además, yo ya soy libre. No soy tu esclavo.<br />
-No, no eres mi esclavo. Pero sabes que no puedes desaparecer del mapa tan fácilmente. Si quieres dejar todo esto sin tener la cabeza separada del cuerpo, te recomiendo que aceptes mi trato. No sufrirá, la trataré como una invitada. Sólo quiero comprobar si eres digno de mi confianza como para dejarte ir sin matarte. Tráela, y serás libre.<br />
-¿Podré irme con ella? –preguntó.<br />
-Podrás. ¿Aceptas?<br />
-Acepto… -contestó, sin darse cuenta del error que había cometido. </div><div class="MsoNormal"> Alejandro se enamoró de Gala nada más conocerla. Se enamoró de sus ojos color esmeralda y de su pelo anaranjado, de su palidez, incluso de su aroma. Le embelesó su risa dulce y sus palabras humildes buscando justicia. Él nunca le haría daño, al menos no queriendo.</div><span style="font-family: "Times New Roman"; font-size: 48pt;"> <br />
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